Autores invitados
Domingo Cavallo analizó dos puntos específicos que le generan “esperanza” sobre el futuro de la economía
El exministro de Economía explicó que la Argentina puede llegar a destacar en el ámbito energético y bioagropecuario

23 de julio de 202303:07
LA NACION
Domingo Cavallo consideró que hay dos sectores que le generan “esperanza” de cara al futuro de la economía, pese a los altos niveles inflacionarios y al valor del dólar. El exministro de Economía del gobierno de Carlos Menem sintetizó que tanto el ámbito energético como el desarrollo de las actividades ligadas a la biotecnología podrían ser beneficiosos para la Argentina y se mostró ilusionado por la reciente reivindicación de las ideas de los 90′.
“Las circunstancias internacionales se están tornando favorables. Está el tema de la transición energética, que por un cierto tiempo le va a dar valor a las riquezas naturales que tenemos, y el campo puede tener una expansión, con la biotecnología”, detalló Cavallo esta noche en declaraciones al programa La Trama, con Laura Di Marco, en LN+. “Tengo esperanza porque veo que por primera vez desde el año 2002, las ideas que predominan, como en los 90, son ideas de una buena organización de la económica, y están prácticamente todos los grupos de economistas trabajando”, indicó.
Consultado sobre las posibilidades de una corrida cambiaria o una hiperinflación, el exfuncionario menemista consideró que son evitables y no debería ocurrir. “No pienso que están esperando una corrida cambiaria. Creo que el sistema financiero es reducido y no veo que haya condiciones para que se produzca una corrida”.
Sin embargo, explicó en qué podría consistir una eventual corrida. “Si la gente saca los pesos del sistema bancario y compra dólares, algo de eso fue pasando, pero no algo que ponga en una crisis extrema al sistema”, dijo y agregó: “Yo espero que no haya posibilidad de hiperinflación, hay que tener mucho cuidado, hay que evitar que las cosas que uno predice se conviertan en profecías autocumplidas, se puede evitar una hiper, y un Rodrigazo. Si se produce una híper no es que le facilitás las cosas al próximo gobierno”.

En ese sentido, criticó las medidas económicas de la actual gestión de gobierno, y además, juzgó como negativo el manejo que hizo durante sus gobiernos la vicepresidenta Cristina Kirchner de la mano de las ideas de Axel Kicillof, el actual gobernador bonaerense. Sobre ello, ejemplificó con el deterioro del sector agropecuario: “En materia agropecuaria estábamos mucho más avanzados que Brasil en cuanto a la política que alentaba la producción agropecuaria, sobre todo en los 90′, pero en los últimos diez años Brasil avanzó muchísimo y con niveles de producción que triplican o cuadriplican los de la Argentina, que se quedó estancada”.
Las ideas de Kicillof y el modelo Massa
En la misma línea, sostuvo que fueron esas ideas estatistas de Kicillof y Cristina las que perjudicaron y condicionaron el desempeño tanto de Martín Guzmán, como de Sergio Massa cuando lo sucedió. “El gran problema que tiene Massa y que tuvo Guzmán es que la economía quedó organizada a raíz de una serie de decisiones totalmente desorganizativas que se tomaron en 2002, y sobre todo desde que se hizo cargo Cristina, que empezaron a razonar en materia económica con las ideas de Kicillof”.
“El mejor resumen de las ideas de Kicillof es un libro que se llama Economía a contramano, donde el punto de partido y su eslogan es que el gobierno es algo muy diferente a una familia, porque puede gastar aunque no tenga, ya que puede financiar, luego, con emisión monetaria”, sintetizó el exministro.
Por esto mismo, aseguró que aunque haya buenos economistas que acompañen a Massa, “están condicionados” por una economía mal organizada. “El exceso de gasto público no está en los médicos, maestros o policías, sino en una cantidad de burocracia, y toda la gente que compone la casta política, que tienen un montón de empleados en las legislaturas. La cantidad de ñoquis que hay… ahí sí que pagan remuneraciones altas”.
Más adelante, habló sobre aquello que debería realizar el actual ministro de Economía, y precandidato a presidente oficialista. “Si Massa realmente quisiera preparar un gobierno futuro, suponiendo que piense que puede ganar, sería importante que arme un presupuesto, que tiene que presentar el 15 de diciembre, sincero y que no sea con grandes números, sino que especifique lo que van a reducir”.
“Pienso que quien quiera gobernar no solo tiene que ganar la elección, tiene que estar preparado para reorganizar la economía argentina y reorganizar las áreas”, señaló. “Este gobierno ha funcionado de manera inadecuada”.
Crítica a Cristina, a los radicales y lo que debe hacer el FMI
Más tarde, se le consultó sobre la foto de Cristina y Massa en la cabina de un avión que se conoció tras un acto de Aerolíneas Argentinas. “Qué busca ella con ese tipo de campaña que está haciendo” se preguntó y respondió: “Creo que Cristina es muy responsable de lo mal que ha andado el país en los últimos años mucho más que Néstor [Kirchner]”.
Diferenció el modelo del expresidente con el que ejerció la exmandataria en sus ocho años de gobierno. “Néstor dentro de todo era más pragmático y en materia fiscal tenía un concepto de buscar el equilibrio fiscal. Después de que murió, Cristina se fue intoxicando de la ideología estatista, no digo marxista porque sería una exageración, pero una manera de manejar la economía inconducente”.
En aquel acto, Cristina hostigó la deuda y el préstamo con el Fondo Monetario Internacional. Al respecto Cavallo consideró: “Se dice que el Fondo le pide una devaluación, pero me parece que lo que debe pedir el Fondo, si es que entienden lo que pasa en la economía argentina, es lo que se llama desdoblamiento cambiario, o sea que el tipo de cambio controlado se limite a importaciones y exportaciones”.
Y profundizó: “Que para todo otro tipo de transacción se deje un mercado libre sin intervención del Banco Central, además que sirva para la entrada de dólares. Y si el Gobierno se animara y viera que casi todos los que proponen una organización economica diferente es en torno a formalizar una economía bimonetaria, lo que podría hacer el Gobierno, que sería de ayuda y favorable para una transición más ordenada, es legalizar el uso del dólar como una moneda alternativa, cosa que ya está ocurriendo, pero con un montón de trabas y costos de intermediación, y dando oportunidades para que se hagan arbitrariedades”.
No obstante, dijo que la intervención que llevó a cabo en la semana el Ministerio de Seguridad de la mano de Aníbal Fernández en la city porteña “no sirve” y que en lugar “de seguir inventando impuestos y dólares especiales para algunas exportaciones, -el Gobierno- permitiera que el dólar comercial se ajuste a un ritmo un poco mayor al de la inflación mientras el Banco Central deja de vender dólares para otros usos, y habilita que puedan entrar los dólares a un mercado libre, una vez que el tipo de cambio alcanza cierto nivel, empezarían a entrar dólares, porque la gente sabe que el precio del dólar no se puede ir a infinitivo”.
Autores invitados
María Belén Ludueña habló de su relación con Jorge Macri y la diferencia de edad
María Belén Ludueña contó cómo vive la diferencia de edad con su pareja, Jorge Macri, sin importar los prejuicios.

05 de junio 2023
María Belén Ludueña concendió una entrevista a Laura Di Marco por ‘La Nación +’ y estuvo acompañada de su esposo, Jorge Macri. Entre otras cosas, hablaron de la oportunidad que se dieron de comenzar una vida juntos, sin importar los prejuicios.

“Yo creo que lo que me dio Jorge en mi vida, fue mucho equilibrio y mucha templanza… obviamente, ya tenía 33 años, tuve otras relaciones. Pero, me di la oportunidad de conocerlo, después de todos los prejuicios, la edad, su actividad…”, comenzó diciendo la comunicadora.
Y cuando le preguntaron cuántos años se llevan, respondió “veinte”, y Jorge Macri, la interrumpió aclarando que eran: “Veintidos, ella siempre me hace descuentos”, agregó con risas.
Sobre la diferencia de edad entre ellos, María Belén Ludueña, sostuvo: “Igual te digo, al principio era un tema, y después cuando te embarcas en una relación, te dejás de concentrar en eso, yo ni siquiera me doy cuenta. Además, él es super canchero, y a mí no me gusta salir, yo soy más tranquila. Nunca fui de salir de noche”, detalló.
Finalmente, Jorge Macri expresó: “Hay una razón… Las coincidencias son mayores que las diferencias, además, ella la verdad ha sido mágica en mi vida”, dijo enamorado.
Así fue la luna de miel de María Belén Ludueña y Jorge Macri
María Belén Ludueña y Jorge Macri unieron sus vidas en matrimonio el pasado 12 de noviembre en una ceremonia que tuvo lugar en la Rural de Buenos Aires y posteriormente celebraron su amor junto a unos 300 invitados que dijeron presente en un exclusivo salón del Hotel Four Seasons.
Después de disfrutar con sus amigos y familiares de su fiesta de casamiento, la conductora de ‘América Noticias Mediodía’ y el ministro del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires se fueron a Ezeiza y abordaron un avión rumbo a París, ciudad que la figura de América TV deseaba conocer.
“La luna de miel será una semana en una ciudad que no conozco y me vuelve loca, Paris. Quiero ir a disfrutar de la comida, la arquitectura y sobre todo, de la moda”, había dicho María Belén Ludueña en una entrevista que dio para la Revista Para Ti previo a su casamiento.



Autores invitados
La increíble vida de Laura Di Marco: de la tragedia de la infancia que la marcó para siempre a formar pareja con un oyente
La periodista, una de las columnistas políticas de LA NACION, estrena este sábado su nuevo programa, De ida y vuelta, en CNN Radio y se apresta a iniciar una nueva temporada de su ciclo La trama por LN+

24 de febrero de 202315:00
“Mi mamá murió en un accidente de autos cuando yo tenía siete años”. La charla con Laura Di Marco no comienza por sus proyectos profesionales para 2023 -que por cierto, tiene unos cuantos- ni por la actualidad política del país -su especialidad como periodista-, sino por algunos rasgos más personales, sumamente íntimos.
“Todo lo que uno va viviendo te va trayendo al lugar en el que estás”, sostiene. Resiliencia es una palabra demasiado usada, algo bastardeada. Lo de ella es crecimiento, madurez e inteligencia para entender que mucho de la vida se construye, pero tanto otro está en manos de eso llamado destino. “No divido en bueno y en malo, creo que todo lo que te pasa te construye y te hace crecer si uno sabe extraer un aprendizaje de todo eso”. Di Marco supo atravesar sus propias sombras, precoces y de infancia, para llegar a un presente de plenitud laboral y amorosa, enamoradísima de quien fuera alguna vez un oyente fiel de su programa radial.
Si de trabajo se trata, mañana estrenará De ida y vuelta, su nuevo programa, que se emitirá cada sábado, de 7 a 10, por CNN Radio. Junto a Di Marco estarán Ana Gutiérrez Matus, abordando los temas de salud; Verónica Dalto se ocupará de las cuestiones de la economía y Pablo Costas cubrirá la actualidad del espectáculo. Además, habrá una periodista deportiva y un humorista, todos bajo la producción de Fabián Gijón. “Me encanta la marca CNN Radio”. CNN Radio fue noticia en las últimas semanas por la salida de su staff, con tintes de escándalo, de Marcelo Longobardi.
-La primera mañana es el prime time de la radio.
-Fue el horario en el que comencé, cuando era una becaria, trabajando en el programa de Bebo Granados en Radio Continental. Lo bueno de estar en CNN Radio es que me permite tener a periodistas de todo el mundo y eso hace que se pueda salir de la grieta, algo que empobrece tanto a nivel entrevistados.
-Es interesante la fidelización del oyente de radio, algo similar a lo que sucede con los lectores de los diarios y que se da menos en la televisión.
-Es así, hasta el punto de tal que, cuando trabajaba en Mitre, una radio muy masiva, cuando me tomé vacaciones, los oyentes me recriminaban que no estuviera al aire. Además, la gente percibe cuando se es auténtico y no se está interpretando a un personaje: eso hace que la audiencia empatice con quien está hablando frente al micrófono.
En cuanto a su labor televisiva, a mediados de marzo regresará a la conducción de La trama, el ciclo político que, desde esta nueva temporada, saldrá los sábados por la noche por LN+ “El sábado se volvió un día muy informativo”, argumenta la periodista, nacida en Villa Urquiza.

Infancias
“Mi mamá era maestra, profesora de piano, y luego puso su propia peluquería, en una época, los años 60, donde no era habitual que las mujeres tuvieran esa independencia. Además, manejó desde muy chica, fumaba y usaba minifalda, lo cual habla de una mujer muy independiente, de avanzada para su tiempo”. De esa mamá que falleció antes de tiempo, Di Marco heredó una biblioteca formidable. “A los trece ya leía a Simone de Beauvoir”.
También de su padre heredó su pasión por los libros: “Papá era más bohemio: vendía libros y cantaba tangos. Él no se ajustaba mucho a la vida burguesa que mi mamá quería”. El matrimonio se separó. “Para la época, también era una rareza, pero fueron valientes en su decisión de tomar caminos diferentes”, reconoce la autora de columnas de opinión en LA NACION.
-Luego del fallecimiento de tu mamá, y siendo vos tan pequeña, ¿cómo siguió la vida?
-Me quedé viviendo con mi abuela materna y, a mi papá, que se había vuelto a casar, lo veía los fines de semana, una especie de tenencia compartida.
-A pesar de haberla perdido a los siete años, ¿qué recordás de tu mamá?
-Me acuerdo mucho, recuerdo el momento del accidente.
Di Marco fue madre de Camila a los 20 años. Hoy, con su hija ya grande, la periodista reconoce que más de una vez celebró ese vínculo que ella no pudo tener con su madre: “Pienso en qué suerte que tiene que puede ir a comer con su mamá: yo no sé qué es eso”.
El padre de Di Marco falleció hace unos años, con lo cual la periodista encuentra en otros esa imagen de la vejez: “Veo a Beto Brandoni y mi pregunto si mi padre, si hubiese llegado a su edad, sería tan canchero como él”. Luis Brandoni y su exmujer Marta Bianchi asistieron –vueltas de la vida mediante– a la boda de los padres de la periodista, ya que el actor y el padre de Di Marco compartieron el servicio militar.
-¿No hay reproches a esa infancia sin mamá?
-Mi infancia fue el motor para hacer lo que hice después. Hubo un estigma por ser diferente, porque yo era la que no tenía mamá, y eso fue lo que más me motorizó para poder despegar, me dio fuerzas para lograr lo que yo quería en la vida.
-La falencia como sostén de una construcción.
-El psiquiatra Boris Cyrulnik, que perdió a sus padres en un campo de concentración, habla de la resiliencia y dice que los niños resilientes son los que sueñan. Yo era una niña que soñaba.
-¿Qué soñabas?
–Soñaba con lo que me pasó después en mi vida, lo cocreaba. Me metía en el baño y soñaba que era una periodista conocida… Soñé con ser periodista desde chica. Era una nena cuando tomaba mi grabador y salía a la vereda a preguntarle a la gente qué era el peronismo. Era un momento complicado del país y la gente tenía miedo de hablar.
-Preguntabas algo que no se condice con el campo de curiosidad de una niña.
-Ya me intrigaba…
-Una máxima sostiene que hay que tener cuidado con lo que se piensa y sueña, porque se termina cumpliendo.
-Decreté lo que me iba a pasar. Mientras todos mis amigos cenaban en una mesa grande con sus familias, yo lo hacía con mi abuela, por eso me encerraba en el baño a soñar. La imaginación puede darte grados de libertad y felicidad, como sostuvo Viktor Frankl en El hombre en busca de sentido.
Ya separada, su madre se puso de novia con un joven diez años menor que ella, lo cual también era una osadía para la época. “Cuando mi madre murió tenía 32 años y su novio había cumplido 22, pero ella, para disimular, decía que tenía 28″. Ese hombre fue un reconocido artista plástico.
En el momento del accidente automovilístico en el que muere la madre de Di Marco, la mujer estaba acompañada por su pareja y por gente amiga. “El que manejaba llegó rengueando para avisarnos del accidente y de la muerte de mi madre. Lo atendió mi tío, quien le dijo ´¡Son unos hijos de puta!´ y le empezó a pegar. Se armó un escándalo en casa”.
-¿Recordás esa escena?
-Me acuerdo perfectamente.
-¿Cómo se supera?
-Hice mucha terapia porque un chico, a la edad que yo tenía, no puede expresar lo que siente, no tiene un cerebro que pueda bancar eso. Quienes trabajan en traumas dicen que uno congela el dolor para poder seguir desarrollando la vida de niño, y se retoma años después para poder trabajarlo.
-¿Cómo se trasciende eso en la adultez?
-Yo venía haciendo un gran trabajo de sanación personal. Uno tiene que curarse de las heridas de la infancia, porque si acarreás para siempre, arruinás tu vida adulta. Si la vida te arranca a tu mamá a los siete años, obvio que te quedan broncas y resentimientos, ¿cómo no te va a generar dolor? En la adolescencia tuve la lucidez de pensar que, si yo quería ser periodista y cumplir mis sueños, tenía que sanar aquello que me había sucedido.
-No es tan sencillo de ejercitar.
-Ese fue mi proceso, fue combustible, me dio potencia. (Facundo) Manes me dijo que todo aquello me dio anticuerpos para bancarme la vida y mi profesión.
-¿Por ejemplo?
-Muchos años después, en 2012, cuando publiqué La Cámpora, teniendo a todo el aparato del Estado en mi contra, me decían barbaridades, me prohibían el libro. Era una ignota para el gran público y en el programa 678 se hablaba de mí. Fue muy fuerte: muchos periodistas no escribían sobre algunos temas por miedo.
Además de su labor como periodista, Laura Di Marco también escribe ficción y textos autobiográficos. Muchos de sus dolores más profundos y sus reflexiones sobre el amor los brindó en Los cuadernos de Laura. En materia de ensayo periodístico escribió Cristina Fernández, la verdadera historia; La Cámpora, historia secreta de los herederos de Néstor y Cristina Kirchner; y Macri, historia íntima y secreta de la elite argentina que llegó al poder, entre otros títulos.
Sin miedos
“Un camporista me subió el libro completo a la web para que la gente no lo comprase”. Di Marco apunta contra la organización política del kirchnerismo hace una década: “Viví escraches, hubo insultos hacia mí como mujer, siendo que ahora el kirchnerismo se llena la boca hablando de feminismo, pero a mí me decían cualquier barbaridad sobre mi cuerpo, mi aspecto. Decían que era tonta y bruta”.
Aquellas enseñanzas del dolor prematuro y sus trabajos de búsqueda personal le sirvieron también para afrontar los sinsabores de su carrera: “Fue un capital emocional que había acuñado a lo largo de muchos años y me sirvió para afrontar situaciones difíciles”. Cuando llegaron los ataques de la política por lo que decía y escribía, entendió que “lo que el otro dice tiene que ver más con el otro que con uno, con las heridas del otro”.
-En la calle, ¿viviste situaciones adversas?
-Me insultaban, amenazaban y me decían barbaridades, me sigue pasando ahora, aunque menos porque el kirchnerismo está en retirada.
-De un lado y del otro de la grieta, no son pocos los periodistas que ejercen una suerte de militancia solapada o directa. ¿Se puede ser periodista y militante? ¿Lo segundo no anula lo primero? ¿Existe una contradicción allí?
-Para mí es una contradicción. El que trabaja estrictamente con la noticia debe ser ecuánime con su información. En mi caso, me he convertido en una analista política, en una ensayista, escribo columnas de opinión en LA NACION, algo que le agradezco al diario, ya que los espacios para la opinión política son escasos para la mujer.
-Opinión no es militancia.
-Por eso digo, se trata de un punto de vista y mi punto de vista es conocido, me nutro de información que trato que sea lo más objetiva posible. De todos modos, en la grieta eso es muy difícil, porque la gente va en busca del periodista que le ratifique lo que piensa.
-El sesgo confirmatorio.
-Exacto, en los diarios siento hay más lugar para los grises y en la televisión es más difícil, porque el periodista se dirige a un público, a un mercado, eso limita más. Pero siempre hay espacio para un periodismo profesional. Por eso separo información de opinión y, con respecto a la información, se debe ser riguroso.
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-¿Tenés contacto con el oficialismo?
-Sí, porque, justamente, para preservar el equilibrio voy detrás de eso. En los libros tuve fuentes de La Cámpora. A medida que la grieta se profundiza, es más complejo sostener las fuentes, pero, por ejemplo, he ido a la casa de Juan Grabois a tomar mate. Debo decirte que los personajes del oficialismo son muy diferentes cuando están cara a cara.
-¿Algún nombre más con el que hayas tenido contacto?
–Axel Kicillof y ni hablar de Alberto Fernández, que fue la fuente de todo mi libro cuando estaba distanciado de Cristina (Kirchner), después se convirtió en esto que vemos, se reconvirtió. Tenía un gran vínculo con él, hablábamos mucho por teléfono, íbamos a comer. Era un tipo sensato, pero se fue radicalizando. A tal punto que me llamó a los gritos cuando escribí sobre la protoCámpora, sobre los jóvenes K, donde estaba Nicolás Trotta.
-Actualmente, ¿tenés trato con el presidente?
-No, cuando asumió, yo ya estaba haciendo La trama, y le mandé un WhatsApp diciéndole “Alberto espero que vengas”, pero no sucedió, iba a medios militantes. Cambió completamente, porque era un hombre abierto que tenía relación con Clarín y LA NACION, por eso Cristina (Kirchner) lo elige. Luego tuvimos una larga pelea por WhatsApp.
-Si hoy le escribís, ¿te contesta?
-No.
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Oyente enamorado
A Laura Di Marco, la radio también le permitió conocer a su actual pareja, quien era oyente de su programa de Radio Mitre. “Me mandaba flores casi todos los días, eran unos ramos impresionantes”. La ceremonia se repitió durante dos meses y el periodista Jorge Fernández Díaz, titular del ciclo en el que estaba Di Marco, comentaba al aire cada vez que llegaba un presente. “En un momento nos conocimos. Fue una noche en la que no teníamos programa por el fútbol y me decidí a conocerlo”.
Aquello aconteció en febrero de 2019, cuando a través de Instagram –la red social por la que se comunicaban en esos primeros momentos– la periodista le ofreció tomar un café al pretendiente, economista de profesión. “Es bastante más grande que yo y me sedujo con su onda protectora y su inteligencia. Además, me acompaña mucho, porque no es fácil estar al lado de una periodista política en medio de la grieta”, concluye.
Autores invitados
Lectores
El cirujano Fernando Cichero habla de la inseguridad, del apriete a la Justicia, de la salud y de las falencias del Gobierno.

“Señor Alberto F., ¿es capaz de reflexionar?, porque su gobierno nos está matando”
EL COMENTARIO DEL EDITOR. ¿Aún piensa que volvieron mejores?
No existe bien más preciado que la vida humana. Como cirujano, cuando uno tiene el corazón de un paciente en las manos y siente que ya no late, la sensación de dolor y frustración es imposible de narrar, al igual que le sucede a un obstetra con la madre o el niño/a o una terapista con alguien ventilado. ¡La vida es algo tan maravilloso!
Pero todos los días siento que usted, señor Presidente, dirigiendo este gobierno, nos está matando física, cultural, social y espiritualmente. Puesto que, en vez de actuar por el bien común, está empecinadamente encargado, casi en forma exclusiva, sólo de luchar contra la Corte Suprema y todos los jueces por generar fallos contrarios a su gobierno o hacia la vicepresidenta y toda su secta. Usted lo promueve con gobernadores afines, acompañados por senadores y diputados.
Fernando Cichero es cirujano cardiovascular, director del Hospital Rocca, jefe de cirugía del Hospital Fernández y profesor universitario.
Parecen que estuvieran ciegos frente a la cantidad de muertes que se dan en casi todo el país por la inseguridad, accidentes de tránsito y problemas de salud. Le pido que pare. Me pregunto si, a esta altura, es capaz de reflexionar.
En su mandato hizo cosas impensadas. Cada vez que va a una playa la embarra, primero atajaba penales y ahora inaugura la construcción de una cancha de hockey. ¿Usted no entiende que hay temas más importantes para el Congreso que el del juez Rosatti. No es prioridad. Pero si insiste tanto con que se discuta en el Congreso, que la oposición dé su postura. Y si lo más probable es que no obtengan la mayoría en el recinto para seguir adelante, encárguese deque sus diputados trabajen en lo que importa de verdad: la vida y el estado de bienestar de la población. Eviten más muertes.
Le doy ejemplos de acción en inseguridad. 1) Que en todo el país, todas las personas que circulen en moto, cuando son dos, lleven el chaleco con el número de patente igual que en el casco. 2) Que las fuerzas de seguridad inunden las calles y permitir la requisa de cualquier vehículo a cualquier hora en todos los grandes centros urbanos infectados de inseguridad. 3) Que cualquier persona que lleve un arma ilegal sea detenida, juicio en flagrancia y 4 años de cárcel no excarcelable.
Cichero, en tiempos de pandemia.
Hay que entender que poner miles de cámaras no previenen ni evita que se produzcan los robos y asesinatos porque al evento lo corren desde atrás. La población está azorada viendo todos los días robos, tiroteos muertos, filmados con las cámaras, pero, con el hecho consumado, qué hacemos.
¿Qué hacemos con las personas ya muertas o golpeadas, maltratadas y robadas, como el caso de Fernando Báez Sosa. Aunque los condenen a todos sus asesinos, Fernando está muerto. La disuasión y prevención se hace con presencia gubernamental en la calle.
Otros ejemplos de acción en vialidad. 1) Que la ley de Alcohol Cero sea nacional y entre ya en vigencia. 2) Que la VTV se aplique a todos los vehículos, no únicamente a algunos giles, cuando vemos miles de autos y camiones destartalados. 3) Que se prohíba que los niños viajen adelante, sobre un mayor, o que viajen más personas que la cantidad de cinturones que el vehículo tiene. Todos los que viajamos por rutas vemos cómo el tránsito circula al revés en las autovías. La mayoría va por la derecha y el sobrepaso lo hacen por la izquierda. No se respetan las velocidades ni máximas ni mínimas. Para esto hay que controlar in situ no por una foto multa. La Policía de tránsito debe circular, no estar parada en retenes , ya que ahí paramos todos y nos “hacemos los buenitos”.
Que no se creen más hospitales ya que los inauguran y luego nunca funcionan bien. En este momento de crisis, hay que reforzar los que ya están abiertos”..
Más ejemplos de acción en salud. 1) Que se cumpla a rajatabla el control odontológico, vacunas y escolaridad para seguir otorgando la AUH. Del mismo modo, el hecho de dar dinero para la niñez sin control (42 % de malnutrición) desestructura la planificación familiar. 2) Que no se creen más hospitales ya que los inauguran y luego nunca funcionan bien. En este momento de crisis, hay que reforzar los que ya están abiertos.
También se podría sancionar la nueva ley de Alquileres, así usted no miente más diciendo que ya entregó 70.000 viviendas y, de paso, le avisa al ministro Massa que, si quiere bajar la inflación debe bajar el déficit fiscal no pagándoles a los ñoquis de La Cámpora (que él decía que iba a perseguir y que están en la ANSeS, el PAMI, el Ministerio de la Mujer, Aerolíneas Argentinas, AYSA, ACUMAR, y siguen las empresas).
Sólo a modo de metáfora, obviamente, por su tono exagerado y violento, en diciembre de 1886 el presidente Domingo Sarmiento le escribía al Gral. Arredondo: “Mi estimado general, se dice que una diligencia ha sido asaltada. A grandes males, grandes remedios. Trate de capturarlos, córteles la cabeza y déjelas de muestra en los caminos”.
Fernando Cichero / CIRUJANO CARDIOVASCULAR. DIRECTOR DEL HOSPITAL ROCCA, JEFE DE CIRUGÍA DEL HOSPITAL FERNÁNDEZ. PROFESOR UNIVERSITARIO / fernando_cichero@yahoo.com.ar
EL COMENTARIO DEL EDITOR
Por César Dossi
¿Aún piensa que volvieron mejores?
“Hace cuatro años veníamos escuchando que dicen ‘no vuelven más’, pero una noche volvimos y vamos a ser mejores”, lanzó el presidente electo Alberto Fernández para despedirse de los miles de militantes que se acercaron al búnker del Frente de Todos en Chacarita, el 27 de octubre de 2019.
El Presidente enfrenta los últimos meses de los cuatro años del mandato. Alejado de Cristina Kirchner y sin diálogo institucional, con la Casa Rosada casi vacía por las internas salvajes y la crisis económica que no puede manejar, todavía piensa en la reelección.
Lleva a cuestas para las urnas un Vacunatorio Vip; festejos clandestinos; los brindis con dictadores y romances con prófugos; récord de indigencia, ataques a la Justicia y a la prensa; una Argentina en el ranking mundial de corrupción; piqueteros oficialistas que controlan los precios; intereses que se le pagan al FMI que ya son récord; el gasto de millones de pesos en planes sociales que ahora suspenden y con una inflación “autoconstruida”.
Pero Alberto gastó US$ 22 millones en el nuevo avión Tango 01. Axel Kicillof luchó por los $ 200.000 millones extra por el fondo que Nación le quitó a la Ciudad, pero en el Conurbano deshecho todavía siguen inaugurando canillas y el diputado Máximo Kirchner juega a las escondidas.
Quizá sea como dijo el presidente del interbloque de Diputados del peronismo federal, el “Topo” Rodríguez: “En el kirchnerismo se están imponiendo los cultores de un arte menor, que es el arte del forreo, de humillar lisa y llanamente al adversario político”. Y a la sociedad, agregaría.
Pero Alberto F. sigue pensando en elecciones, no con ideas para un país mejor sino conspirando para impedir que el otro gane pensando en el partido y no en la Argentina. Son conductas individuales sin pensar en lo colectivo lo que lo sentencia a la derrota. ¿Presidente, ¿aún piensa que volvieron mejores?
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